mércores, 20 de novembro de 2013

el chico de la gran sonrisa, la mirada clara y el corazón nuevo

Hoy te escribo a tí, a ese chico de la gran sonrisa, la mirada clara y el corazón nuevo. Alguien a quién conocí, por casualidad y de una de las mejores formas, con el optimismo de un mañana mejor. ¨Te has ido, y aunque sé que no quieres que lo haga, hoy estoy llorando por ti. No te preocupes, solo son unos ratos tontorrones de los que seguro tú te reirías a carcajadas, te estoy imaginando.
Algunos pueden decir que apenas nos conocíamos. ¿Cómo se puede conocer a una persona que has visto unas cinco o seis veces? Y sin embargo, tengo la sensación de haberte conocido desde hace tanto tanto tiempo. 
Te recordaré, siempre con ese humor tuyo tan similar al mío, cuando bromeamos de nuestra situación de una forma que igual los demás no entienden. Desde el día que te conocí supe que ese humor era similar. Saber que podíamos estar hablando de lo nuestro de una forma que los demás no podían no entenderlo.
Recuerdo ese primer día que te conocí y el último que te vi, y todos los demás, y siempre te recuerdo riendo de la vida, y de la situación, incluso cuando sabías que no eran ta buena como debería.
Siempre serás el chico de la gran sonrisa, la mirada clara y el corazón nuevo (aunque al final nos haya salido algo rana). 
Te mando el beso que nunca te dí, y no me despido. Hasta luego amigo.
 

Copyright © diario de una fontan. Template created by Volverene from Templates Block
WP by WP Themes Master | Price of Silver